Cuidado con lo que comemos
La Tilapia es hoy en día uno de los peces más comunes. Se consigue a un buen precio, es fácil de limpiar y retirar piel, espinas, y por si fuera poco difícilmente se daña a altas temperaturas, problema que sucede con otras especies. Sin embargo, la tilapia que comemos es fruto de la piscifactoría, lo […]
15 febrero, 2017
La Tilapia es hoy en día uno de los peces más comunes. Se consigue a un buen precio, es fácil de limpiar y retirar piel, espinas, y por si fuera poco difícilmente se daña a altas temperaturas, problema que sucede con otras especies.
Sin embargo, la tilapia que comemos es fruto de la piscifactoría, lo que significa que no podemos encontrar tilapia silvestre en alguna tienda o restaurante. De verdad las tilapias comen algas y plantas del estanque; toda vez que, en las granjas engordan a los peces con maíz y soya transgénicos y la grasa saludable en estos peces es habitualmente nula. Por eso, te presentamos 5 razones por las que debes tener cuidado de donde comes tilapia.
- El omega tres
Nuevos estudios han confirmado que el consumo de tilapia puede causar inflamación en las arterias, lo que converge en problemas más delicados como la artritis, asma bronquial, enfermedades del corazón y otras enfermedades aún más graves
Las personas que consumen tilapia en busca de su componente omega tres amplifican el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y seguidamente, ataques del corazón. De hecho, los investigadores han descubierto que los riesgos de inflamación por su ingesta son muy superiores a la de perro caliente por ejemplo o chicharrón.
- las piscifactorías
Los peces de piscifactorías, o cultivados, poseen un peligro de causar cáncer de hasta 10 veces más por contaminantes orgánicos que los peces adquiridos en su hábitat natural; esto puede ser primariamente a los alimentos que se manipulan en los criaderos de peces.
Motivo de alarma, ya que los complementos nutritivos de estos peces son esencialmente carne de cerdo, así como desechos de la industria avícola.
Indudablemente, las heces de las aves de corral forman parte de esta combinación alimenticia que despues es servido en nuestros platos.
- El poco valor nutritivo
Al expresar bajo nivel nutritivo, nos referimos al ácido graso omega tres y en contrapartida al omega seis
Las investigaciones han dado a conocer que los peces sembrados poseen un bajo nivel de ácidos omega tres, confrontando con los peces silvestres, haciendo que dichos ácidos grasos sean poco útiles para nuestro cuerpo.
Comprobando este hecho, los peces cultivados en granjas despliegan una mayor concentración de ácidos grasos omega seis ya que tienden a ser más grasos
El omega seis es un alimento menos sano para nuestro cuerpo, que consumiéndolo en abundancia pueden causar inflamación en las arterias y luego derivar en artritis o peor, en enfermedades cardiovasculares.
- Poco saludables
Así mismo, los investigadores han descubierto una alta presencia de antibióticos y otros químicos en la carne de la tilapia, que son utilizados por los criadores a fin de prevenir enfermedades en los peces, producto de la acumulación propia de un estanque y reducir la tasa de mortalidad.
Además de los antibióticos, los piscicultores crían a los peces en aguas tratadas con productos químicos como pesticidas, para combatir con los parásitos presentes en el agua. Para evidenciar la peligrosidad de estos químicos, los investigadores expusieron a un salmón salvaje a estos pesticidas comprobando su pronta muerte.
Como si esto no fuera poco, esta fatalidad es traspuesta de los estanques a los causes acuáticos y el mar cuando las piscinas son limpiadas, perturbando gravemente el ecosistema de otras especies que viven en su estado natural.
- Las dioxinas
El óxido de dibutilestaño es un producto químico utilizado en la producción del plástico de PVC que es muy utilizado en zonas campestres y granjas de peces.
Se cree que su presencia en peces de granja es de 6 veces mayor que en los peces silvestres y se relaciona este hecho con el aumento de casos de asma, alergias y otros trastornos metabólicos.
De otro lado, se descubrió que los niveles de dioxinas en las granjas son 11 veces más altos que en el hábitat natural de otros peces
A esta sustancia tóxica se le culpa la formación de células cancerígenas, además de otras peligrosas complicaciones en nuestro sistema inmune. La dioxina puede permanecer en nuestro cuerpo durante 7 a 11 años, lo que lo convierte en un verdadero problema para nuestra salud. Ahora, lo más importante antes de comer estos alimentos es asegurarnos de su origen y estado, ya que no todos los animales son criados igual, y tampoco todos son provechosos para nuestro organismo.
Fuente Diario Viral